El pasado 10 de julio de 2020 terminé de trabajar oficialmente en el Ayuntamiento de Puertollano.

Han sido seis meses trepidantes en los que hemos hecho muchísimas cosas, pandemia mediante.

Entré para sustituir a una compañera que se reincorpora a su puesto y que me ha enseñado muchísimo durante estos meses para desempeñar la parte de documentación y administración del trabajo. ¡Gracias Raquel por ser tan buena compañera!

He aprendido cómo funciona un ayuntamiento por dentro y he visto el día a día de dos concejales comprometidos y profesionales en su labor de servicio público.

Les agradezco mucho a Jesús y Natalia que hayan confiado en mí para ayudarles en su trabajo diario de mejorar la ciudad de Puertollano.

El puesto que he ocupado ha sido de personal eventual, un cargo que eligen los partidos políticos con representación en la corporación municipal para que puedan desempeñar su labor municipal.

El trabajo consistía, en el día a día, en organizar la ingente cantidad de documentación sobre los miles de asuntos que se tratan en un ayuntamiento.

Comisiones informativas, mesas de contratación, reuniones de consejos municipales, juntas de gobierno local y, por supuesto, los plenos.

En Puertollano he crecido como profesional. Ha sido el trabajo más largo y estable que he tenido nunca: seis meses a jornada completa.

Además, después de haber estado contando el Puertollano Winter Festival para Compact Cheese al estilo de La cueva del río, la ciudad minera ya empezó a tener un lugar especial entre mis recuerdos.

No obstante, en Izquierda Unida sabemos que en las instituciones estamos de paso. Así que ahora toca volver a la calle y seguir creciendo como profesional.

Estoy feliz por haber conocido a gente maravillosa, trabajadora y comprometida con hacer del mundo un lugar mejor.

Un orgullo haber trabajado a vuestro lado codo con codo.

¡Gracias por todo, Puertollano!